Mi Lobito

Descripción de la publicación.

10/4/20251 min read

worm's-eye view photography of concrete building
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Mi Lobito

«¿Y la pelota?»
«¡Vámonos!»
«¡Ahí voy, eh!»

Tantas expresiones
teníamos él y yo
para entendernos.

Tanta nobleza
dejaría sin palabras
a cualquier caballero.

Noches de copas de vino,
cuando yo llegaba,
y al parquearme afuera
tenía un guardián:
dientes ya muy chatos,
sobrepeso, mucho pelo
y amor que entregar.

Siempre apoyado en dos patas,
esperándome en el portal,
olvidando la hora y el cansancio
cuando yo llegaba.

¿Y qué era lo que Lobo tanto esperaba?
Su cabeza,
quedando entre mi pecho
y su hocico
al inicio de mi mentón.

Simplemente un abrazo.
Tanto amor que transpirábamos
haría que la humanidad cambiara.

Hoy, mientras te escribo esto,
no estás aquí para verme,
mucho menos
para acomodarte a mi lado
y bostezar
después de largas horas de sueño.

Hoy te recuerdo
y le aviento una lágrima al teclado.
Te veo en fotos,
pero ni un álbum entero
llenaría
un poco de lo mucho
que dejaste.

Qué diferentes son
las líneas de la vida
entre uno y otro.