En que pensarás cuando te pienso a ti
Descripción de la publicación.
10/4/20251 min read
En qué pensarás cuando te pienso a ti
Todos aquellos días
en donde la luna era nuestra espectadora,
o los días de camping
donde dos lienzos esperando a ser pintados
acabaron siendo embarrados por una copa de vino,
mismo vino que cayó sobre estos
cuando yo, por precipitado,
y tú, por ingenua,
un botón de tu blusa quise abrochar
y tu pecho, que jaló todo de mí,
no nos soltó hasta ver a la espectadora luna.
La misma que menciono cada noche,
todas las noches, durante tantas noches,
pareciera que no se aburre de vernos
y nosotros, de que nos vea.
Fue una lástima esa noche
en donde la luna ya no salió
o nosotros tal vez ya no la encontramos.
Lo más lamentable es lo que sucede después
con todos los besos que uno deja en el cuerpo ajeno:
¿a dónde van todas las canciones que me tatareabas?
¿dónde quedaron todas mis caricias
que dejé en tu pecho y abdomen?
Aún quedan tus botas negras debajo de mi cama,
la misma que volteábamos por toda la casa,
cuando ya no sabíamos diferenciar
entre cama y cocina.
De seguro por eso aún sigue regada tu ropa
en cada mañana,
mañanas que hoy no tienen dueño,
y besos sin destinatario,
mapas que ya no hacen encuentros
en puntos medios
donde los anfitriones son el escritor
y el remitente de esta carta.